2007 Edge 2006 F-350 2006 Fusion 2005 Mustang Flex en Miami
 

FORD FLEX 2009: sobre todo estilo, mucho estilo...

por: Pepe Forte

Fotos de Ford Motor Co. y del autor. Posted: June 13/2008

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Las fotografías que por casi un año estuve previamente viendo del Ford Flex hasta que le tuve delante de mí, nunca lo reflejaron con justicia. Lo imaginé más grande, aún por encima de la visión del conceptual Fairlane —del cual nace; ambos casi son dénticos—, y claro que las imágenes, más allá de lo puramente visual, tampoco pudieron revelar el verdadero espíritu de este nuevo triunfador de la compañía del óvalo azul. 
  
   Con la salida del Flex, junto con el Taurus X —que hasta hace poco se llamaba Freestyle—, y el Edge, Ford completa la panoplia de crossovers de la compañía.

Flex en New York
Entre el 19 y el 20 de mayo Ford nos invitó a probar el Flex en New York. El lanzamiento del vehículo tuvo como base el exquisito Gramercy Park Hotel, pero el evento —a diferencia de otros— no irradió desde ahí, sino que termino ahí. Y eso tuvo la ventaja de permitirnos experimentar el auto también como pasajeros, porque al llegar al aeropuerto La Guardia en NY, los periodistas asistentes fuimos transportados en una flotilla de Flexs hasta donde tuvo lugar la exposición técnica. Luego del almuerzo y el breefing, ya al volante del Flex, lo manejamos en un circuíto de prueba de casi un centenar de millas desde New York City y por Westchester, una ruta bonita e ideal para revelar el talento del vehículo, porque combinó el tráfico agresivo y único de la Gran Manzana con la conducta más reposada de la circulación suburbana y por momentos rural. Mi carmate fue el amigo Jaime Flórez, editor de SOBRE RUEDAS MAGAZINE, mi compañero de micrófono en SOBRE RUEDAS RADIO además. Nos acompañó en el viaje el ingeniero Gary Boes, óptimo auxilio a todas nuestras inquietudes.

   Durante su turno como copiloto, Jaime se ocupó del test que en conjunto con Ford nos aplicó Sirius® Satellite Radio, consistente en obtener el pronóstico del tiempo para el día siguiente en NYC, la gasolina más barata hallada en el recorrido, y la dirección y velocidad del viento al arribar a medio camino en Saw Mill Parkway. Información toda que el sofisticado Sistema de Posicionamiento Global instalado en el Flex nos brindaría (este fue sólo uno los componentes del ingenioso examen que detallaré debajo).

¿Por qué el Flex?
Ford había tocado ya, y con muy buen tino, el segmento de los crossovers con el Freestyle, un vehículo con las más genuinas características de la configuración.

   ¿Y por qué teniendo un crossover en su line-up Ford agrega otro? Pues porque desde toda la vida, de los tres grandes de Detroit, Ford Motor Co. ha competido con menos subdivisiones contra los otros dos cuyas sombrillas cobijan más marcas (hace 50 años, en 1958, General Motors contaba con Chevrolet, Pontiac, Oldsmobile, Buick y Cadillac; Chrysler contaba con Plymouth, Dodge, Desoto y Chrysler, mientras que Ford hacía historia con sólo Ford, Lincoln y Mercury. Y ese esquema, sabores más, sabores menos, prevalece). De modo que la primera respuesta es diversificarse. El Flex hoy tendrá que desafiar a la actual tripleta de crossovers de GM sobre la plataforma Lambda: el Buick Enclave, el GMC Acadia y el Saturn Outlook, y para colmo ya viene por ahí el Chevy Traverse. Y estos vehículos son distintos. ¿Y Ford? Well, para eso es el Flex.

   Pero hay una segunda razón a pesar de que no se mencione: la necesidad de un vehículo auténticamente de familia... porque la minivan de Ford... bye, bye, love...

   Aunque los ejecutivos de Ford, en términos de reemplazo— no dijeron explícitamente que esperan que los prospectos de aquella hagan mutis hacia el nuevo producto, es fácil suponer que así será. Y ahí es donde los temores de canibalismo —que el Flex devore en venta al Edge y/o al Taurus X— se disipan un poco porque se supone que el Flex, junto con otra clientela, atraiga a la de la recientemente cancelada minivan. Ahora, si de caníbal se trata, sin duda que el antropófago aquí será el Flex. ¿Quiere otro detalle? El Flex es ensamblado en la misma planta canadiense de la desaparecida Freestar. Por otro lado, es más largo que el Freestyle. Mide más de 202" de largo y tiene una distancia entre ejes de 118". Su plataforma D3 es ahora nada menos que 5 pulgadas más larga.

Me alegro que Ford no haya "quemado" el histórico nombre de Fairlane en un crossover. Aún conservo la esperanza que algún día rebautice al Taurus con él. (Fairlane fue durante años el nombre más popular y reconocido entre los sedanes de Ford. Fairlane, era el nombre de la mansión de Henry Ford)

El test Ford/Sirius®
Sirius es el proveedor de radio satelital de Ford. En el evento, junto con Ford, el servidor nos extendió un test cuya recompensa al o los participantes de nota sobresaliente sería un receptor satelital de Sirius®. El examen consistía en conseguir la información de ruta que mencioné antes e identificar alrededor de una decena de siluetas de SUV's, crossovers y minivans de competidores —domésticos e importados—, entre los que se incluía el perfil del Flex... ¡que fue el único que los periodistas identificamos al vuelo!

Y esto nos conduce a una reflexión inmediata sobre el styling del Flex:

El styling del Flex
No le quepa duda: el Ford Flex es un vehículo que nadie tendrá dificultad en identificar aún por encima de caraterísticas que no son "endémicas" en él, sino que se hallan en un par de otros modelos ajenos. Primero: es un auto cuadrado como la primera generación del Scion xB. Segundo: la combinación de dos tonos —el techo blanco, y el resto del vehículo de otro color, como el Mini Cooper y el Toyota FJ Cruiser. Y tercero: Hay quienes ven también una discreta coincidencia en el tratamiento de la cristalera y de los pilares con el Range Rover. O.K., concedamos... Pero aún así el Flex es genuino, identificable... es eso de, ¡mira, ahí va un Flex!
  
   Sin embargo, Ford no obliga al prospecto a una sola alternativa bitonal, sino que ofrece el Flex también en un solo color, completo, por si alguien no gusta del techo blanco

Personalmente, mi combinación preferida —digamos que la "oficial" de Ford porque es la más favorecida en las promociones— es la de cuerpo rojo vino con techo blanco—. Mas el elemento distintivo del Flex, rebasando su 'cuadratura', son los surcos laterales, cuatro líneas horizontales a bajorrelieve que cursan las puertas y que son una nostálgica reminiscencia del ingenuo woody, aquel vagón Ford de los años treinta, enchapado en madera. ¡Y ése fue precisamente el elemento que nos hizo reconocer de manera expedita al Flex en el test!

"Los Miserables" y las puertas del Flex
Víctor Hugo, el escritor francés autor de Les Misérables, puso en los labios del personaje Monseñor Myriel una frase aleccionadora. Criticado por las monjas por la dedicación que prodigaba a las rosas, Myriel les contestó: lo bello es tan necesario como lo útil. Bien. Las puertas de Flex carecen de la barra longitudinal protectora contra portazos ajenos... que habría arruinado la belleza de las melancólicas rayas horizontales. Claro que la sombra de Victor Hugo no puede estar más cerca de una compañía americanísima como Ford que lo que estaría de Citroën, pero lo que quiero subrayar con  esta analogía, remota y acaso cursi, es que al imponer la belleza por sobre lo útil en el caso de las puertas de Ford, la decisión es genial.

 

Pepe Forte, editor de i-Friedegg.com y Rich Gresens —a la derecha—, Jefe de Diseño del equipo del Ford Flex, durante la presentación del vehículo en New York, mayo del 2008.

Y ahí está el punto: que en el Flex, aspecto motriz y prestaciones aparte, su nota máxima es cómo se expresa visualmente. Justamente durante la cena en el penthouse del Gramercy, compartí la mesa con Rich Gresens, Jefe de Diseño, quien dirige los equipos de figuración del Flex y del Explorer, y éste me reveló que la inspiración del flamante Ford viene... ¡de las aspiradoras de los años 40 y 50! Aunque a primera vista parece un chiste, no lo es. Aquellas aspiradoras eran todo un esfuerzo a por la eficiencia, la funcionalidad, la facilidad de explotación y la belleza de diseño. A eso aspiraban las aspiradoras y lo lograron. El Flex lleva dentro esos mismo principios.

   Elementos del estilo típico de la última ola de diseño de Ford son el grill o parrilla delantera compuesta por tres bruñidas barras anchas y el contorno cromado de las luces traseras. En el caso del Limited, éste es fácilmente identificable por detrás gracias a la lámina horizontal también acanalada que imita aluminio, que adorna la quinta puerta, y que corre entre las lámparas traseras.

   El green house teñido de negro le agrega elegancia, y protección y privacidad para sus ocupantes. Y aspectos tan revolucionarios como las puertas que 'abrazan' al auto por debajo garantizan más integridad a la carrocería, insonorización y un escudo contra los elementos.

El jovial Alvaro Cabal, de Ford Motor Co., frente al Gramercy Park Hotel en New York, satisfecho de la buena marcha del evento de presentación y de los resultados logrados en el Flex.

SE, SEL y LIMITED
El Ford Flex se ofrece en tres modelos, el SE, el SEL y el Limited. A las facilidades comunes a los tres vehículos como ventanillas, asientos, pestillos y retrovisores eléctricos, el Limited en el pináculo de la lista, añade entre otros elementos finísima vestidura de piel perforada, una nevera que alberga hasta dos botellas de 20 onzas entre las sillas de la segunda bancada —¿este es un Maybach o un Ford?—, el volante con incrustación de madera y el conjunto de claraboyas Multi panel Vista Roof™ —también opcional en el modelo SEL—. El Limited viene con aros pulidos de 19" y, opcional 90 días después de su lanzamiento, de 20", cromados. Pero el SE y el SEL también están muy bien dotados.

Junto con la nueva F-150, el Flex es el otro carro de Ford que ofrece el EasyFuel Capless Refueling System, o sea, boca de tanque de gasolina sin tapa, que obtura la presión de la pistola de la bomba de gasolina y "cicatriza" por sí sola gracias a un avanzado sistema de ventosas.

Tren motriz
 Un solo motor anima al Flex, un Duratec V-6 de 3.5 litros, de 262 caballos de fuerza y 248 lb x ' de torsión, con un rendimiento 16mpg en la ciudad y 24 en la autopista. Es un motor ULEV. Esta planta conecta con transmisión automática de 6 velocidades y se ofrece en tracción trasera o All Wheel Drive según el modelo.
 
   A pesar de que su nombre hace pensar en ello, el Flex no trabaja con etanol. Fue bautizado Flex a modo de apócope en inglés de flexible, flexibilidad, para reflejar su versatilidad.

 

Flex por dentro
Pero nadie negaría que el interior del Flex encarna la cima de su diseño. El acabado de la pizarra es exquisito gracias a la combinación de tres géneros y texturas diferentes que armonizan perfectamente junto con los acentos en madera y el revolucionario obsidio —aparenta aluminio— además de los cromados de las toberas del aire acondicionado. La superficie de la consola y de la panelería interna de las puertas es un polímero blando, amistoso al contacto con la piel y las extremidades y articulaciones del cuerpo, que por su suavidad anula el golpe y además contribuye por absorbente al silencio en cabina.

El Flex cuenta con tres filas de asientos para 7 pasajeros en configuración máxima. Las dos últimas bancadas son abatibles para más carga o mejor acceso. Las butacas son mullidas como en los autos high-end. Y lo mejor es el gran espacio para las piernas entre la primera y segunda fila de asientos, inusual en un vehículo de tres. La tercera fila no es exactamente the best seat in the house, pero es absolutamente tolerable y humana, una de las más confortables que he conocido gracias a la talla de las butacas independientes, semejantes en tamaño a las del resto del vehículo. Con las dos últimas filas de asiento aplanadas se obtiene un volumen total de carga de 83.2 pies cúbicos. En el Limited, el plegado de la tercera fila se hace electricamente.

   El brazo de la puerta es muy cómodo, la posición de la palanca de cambios es excelente, y se ofrecen portavasos y 'bolsillos' por doquier para almacenar la parafernalia de útiles electrónicos o inertes que lleva hoy consigo un ciudadano del tercer milenio.

Electrónica
Y vamos ahí: El screen —de 8 pulgadas— que preside la pizarra, se ocupa del sistema de entretenimiento y navegación. Del tipo touch-on ofrece información detalladísima y disímil sobre audio, ruta, etc. Más adelante este año, Ford sumará servicio de emergencia 911 avanzado a su aplaudida asociación con Microsoft, que fructificó en el eficaz sistema SYNC que sincroniza tocadores MP3 y comunicadores Bluetooth con el stereo del auto y que se activa por comandos vocales (¡sí, entiende... funciona!). By the way, el sonido va por SONY. El equipo puede ofrecer un disco duro capaz de almacenar unas 2300 canciones, con lo que el Flex se convierte en una especie de i-Pod rodante.
  

El sistema Travel Link™ informa al conductor la distancia a las gasolineras más cercanas, la marca y el precio del galón.

 

Impresión de manejo
¿La primera impresión?, ya lo dije: de pasajero —y también la última, porque fuimos devueltos al aeropuerto de nuevo en el Flex—. Sentado en la segunda fila de asientos se nota el punto perfecto de la suspensión, más suave que una deportiva, pero que también dialoga por sólida cuando se está al volante del vehículo.

   A mis aproximadamente primeras 100 millas de manejo en la experiencia neoyorquina, se sumó luego la oportunidad exclusiva de una semana de conducción en Miami, Florida. Exclusiva digo porque unos 8 días después del lanzamiento en The Big Apple, Ford efectuó un encuentro sólo para la prensa hispana en la Capital de Sol y allí este servidor resultó agraciado en un sorteo que premiaría a un periodista de automovilismo como el primero en probar el Ford Flex —por entonces estaba todavía vigente el embargo informativo del vehículo que fue levantado el 12 de junio—. Huelga decir —es una confesión en realidad— que esa semana en que probé el Flex en Miami resultó en una cruel ignorancia de mi parte para otro auto que debí probar y que me fue servido al igual que el nuevo Ford por los impecables servicios de Prestige Auto Specialists, con base en Boca Ratón, presidido por el Sr. Marcelo Serrato. El Flex se robó todos mis afanes...
Pepe Forte y Alvaro Cabal [izq.], tienen motivos para celebrar el miércoles 28 de mayo del 2008 en Miami. En la fecha, aproximadamente una semana después del lanzamiento nacional del Flex en New York, Ford hizo una presentación exclusiva para los medios hispanos en el Sur de la Florida. Durante la cita, en un sorteo para elegir al primer periodista de automovilismo que probaría el flamante vehículo, Forte se llevó el premio.

En mis años de periodista de automovilismo, fui objeto de bocinazos de saludo y admiración, y de abordaje de peatones y otros conductores bajo la luz roja a mi lado que elogiaban o preguntaban detalles de dos vehículos que en su momento acapararon toda la atención en la semana de pruebas: el Jaguar S-Type y el Chrysler PTCruiser. Con el Flex me ocurrió igual y nos pasó a este servidor y al colega Sergio Tacchella (de Batanga Autos.com y productor de SOBRE RUEDAS RADIO) cuando probamos juntos el vehículo el día de la presentación en Miami. Incluso en New York, donde el transeúnte en las pobladas aceras de la urbe está más atento a otras cosas que al tráfico como no sea al cruzar una calle, noté las miradas de atención hacia el vehículo. 
  
   La suspensión es suave, la precisa para un  auto de familia, pero con una pincelada de firmeza como para no perder el suelo. La dirección es comunicativa y el frenado firme aunque con un leve 'buceo' lateral bajo un pisotón a fondo. Quizás, el peso del vehículo. El Flex ofrece una sensación de manejo integral, globalizadora, de coherencia entre el conductor y toda la caja del coche. La visibilidad es buena y la cabina es insonorizada. El nuevo Ford Taurus debería imitar al Flex en lo que respecta a ruido del motor en el habitáculo.
  
   El acceso es fácil porque es un vehículo bajo, pero alto por dentro, que nos deja usar un sombrero. El conocido ingreso de código de Ford ahora ha reemplazado las teclas por celdas sensibles al tacto que se iluminan con el toque.

   El Flex acelera bien cuando se castiga el acelerador y la transmisión hace sus cambios de marcha fluidamente.

Seguridad
La transmisión AWD, junto con el sistema standard Advance Trac con RSC (Roll Stability Control), garantiza la estabilidad del vehículo en desplazamientos comprometedores. Bolsas de aire frontales y laterales protegen las 3 filas de asientos y claro que posee frenos ABS. En marcha atrás, la cámara de retroceso ayuda a retoceder en los modelos dotados con el sistema. Naturalmente, Ford no ha descuidado la seguridad, que es un aspecto capital en un auténtico auto de familia.

Balance
Pero, ¿sólo de familia? I don't know... el Flex no es insípido como lo puede ser incluso la más dispuesta de las minivans. Es decir, que un vehículo típico de familia no inspira a otra cosa que a la familia, pero el Flex tiene algo de agent provocateur que conquista incluso al más solitario de los conductores. Por lo menos así lo siento. Con un rango de precio tentativo que oscila entre los $28 y los $40 mil, con el Flex, de nuevo Ford Motor Company tiene un triunfador en las manos.